Año XLIV  Una comunidad Libre y Virtuosa (segunda parte) Septiembre de 2004 No. 920

Nota del Editor:

El padre Robert Sirico es un sacerdote católico, rector de St. Philip Nery House en Kalamazoo, Michigan, presidente del Acton Institute for the Study of Religión and Liberty, que él mismo fundó en 1990, es además, autor de varios artículos académicos y populares sobre la fe y la política, traducidos a cinco idiomas.

 

 

 

Una Comunidad Libre y Virtuosa

Segunda parte

 

El Vaticano 11 confirmó que esta posibilidad es la realidad de hoy, cuando la Iglesia no tiene poder temporal. 

 

Professor Felice: Hay gente hoy en día que se cuestiona si esta idea de libertad religiosa es realizable.

 

Padre Sirico: Muchos gobiernos se sienten amenazados

cuando la religión gana demasiado poder cultural. Y cuando

la religión tiene muy poco, las Iglesias buscan formas de hacer

que un fin gire alrededor de su misión evangélica y trabajan a través de la política para lograr un objetivo. Pero yo no creo

que esta tendencia intelectual sirva como acusación del ideal,

no más que lo que la existencia de asesinatos acusa a la ética

de la vida. Debemos continuar peleando por el ideal de la

libertad religiosa, que existió al momento de la fundación y

se perfeccionó progresivamente a mediados del siglo XX. Los

creyentes tienen la obligación moral de pelear por su libertad,

independientemente de lo que haga el Estado.

 

Ahora bien, la libertad religiosa no requiere que todos nos volvamos agnósticos. Por lo contrario, tenemos la obligación moral de abrazar la verdad -pero si la percepción de la gente de lo que es la verdad, se opone, y sucede y seguirá sucediendo, no debemos poner fin a estos conflictos a través de la violencia o la coerción, o poniendo una u otra fe en la planilla del gobierno, debemos trabajar nuestras diferencias y debatirlas en la plaza pública. No debemos buscar imponer la verdad, sino más bien, la libertad de proponerla.

 

El verdadero problema es que el Estado moderno quiere desplazar el rol de la Iglesia en la sociedad y volverse un objeto de culto. La razón de que se hayan suprimido las oraciones en las escuelas públicas no es que podría ser ofensivo para los no creyentes, sino que la religión cívica no quiere competencia. El Estado moderno hace vastos reclamos para sí, que interfieren con la conciencia religiosa. Lo mejor que podría pasarle a los creyentes de hoy, sería que el Estado renuncie a su reclamo de divinidad y permita más libertad de culto. Sin embargo, que eso suceda, requiere una nueva filosofía política.

 

Professor Felice: Otro reclamo contra la cristiandad es que es incompatible con una vibrante cultura intelectual y artística.

 

Padre Sirico: Esto, nuevamente, es una caricatura que data

del Iluminismo, un período que le dio al mundo el don de un

mayor entendimiento de la libertad humana, pero, lamentablemente, dejó el secularismo marcado en el mundo. La verdad es, como se mire, tanto en el arte como en la arquitectura, o en la ciencia y la universidad, uno encuentra sus orígenes en la cristiandad. En todo esto, recomiendo el extraordinario trabajo de Lord Acton demostrando el origen

cristiano de la libertad y la civilización.

 

Aún la inquisición, profundamente lamentable e inhumana como fue, fue un sistema de averiguación con carga de pruebas y la posibilidad de falsificabilidad. Fue un sistema primitivo, pero ¿comprado con qué?. Fuera de la cristiandad, tales

estructuras no existieron en absoluto: existía solamente la regla

de la multitud violenta y la conquista, o el dictamen puramente arbitrario.

 

Debemos relajar nuestros estándares morales cuando miramos a la historia, pero es, al mismo tiempo, instructivo considerar

el contexto histórico y notar la aparición del progreso en la historia.

 

La historia de la cristiandad es de progreso y desarrollo, con

adversidades y regresiones en el camino, un proceso por el

cual, lentamente nos volvemos más creyentes en el centro

               espiritual, filosófico y antropológico de la fe.

 

Professor Felice: Aun así, Acton no fue, de ninguna manera,

un apologista acrítico del rol de la cristiandad en la historia.

 

Padre Sirico: En muchas maneras era un cristiano consciente

de la historia y de sus tiempos. Escribía durante el período

Victoriano sobre la urgencia moral de que la Iglesia enmiende

sus errores pasados en los asuntos temporales. En cualquier

caso, no vio ninguna necesidad profunda de determinar a la

Iglesia como moralmente responsable de cada acto de coerción

                                                injusto de la historia.

 

El día de penitencia de Juan Pablo II durante al Año del Jubileo, es una exculpación de Acton en ese sentido. Es un testigo

       que da fe que, luego de un siglo de comunismo e

incomparables matanzas de parte de los estados seculares, la

Iglesia aún ve la necesidad de ofrecer un acto de contrición

por el comportamiento de algunos de sus líderes del pasado.

                Es algo bueno y un ejemplo para el mundo.

 

Al mismo tiempo, es importante recordar que Acton escribía

antes de las atrocidades del comunismo y el nazismo, aunque

ciertamente vio que el colectivismo traería sufrimiento humano

masivo. Su esperanza era que la Iglesia limpiase su propia

conciencia de manera que estuviera en una posición ideal de

señalar y condenar los crímeres donde fuera y como fuera que ocurriesen. Creo que en nuestros propios tiempos,

podemos estar muy satisfechos con el historial de la Iglesia

cristiana defendiendo los derechos humanos.

 

Es interesante como la mente secular crítica tan severamente

los problemas del pasado de la Iglesia, aun ante la realidad

del comunismo, la manifestación más colosal de maldad

humana que ha ocurrido en nuestra generación. También

permanecen callados ante al aborto y los ataques a la ética de

la vida que están ocurriendo. Esta hipocresía revelado odio

por la religión.

 

Professor Felice: Hoy en día, el mundo académico en particular, está lleno de gente que rechaza la verdad de la fe religiosa y se ríe de la moralidad cristiana. Ciertamente, la universidad parece existir dentro de un contexto de ateísmo práctico.

 

Padre Sirico: Es un híbrido intelectual peculiar que cree y

apoya tal situación. Se supone que los intelectuales de las

ciencias sociales están conscientes e involucrados con las

fuentes de motivación detrás de la acción y el cambio humano.

Sin excepción, cada sociedad en la historia del mundo ha sido

religiosa en algún u otro grado. Eso es porque la gente se

inclina naturalmente hacia la auto-trascendencia. La forma

en que lo logran refleja mucho sobre el supuesto de partida

que impulsa el cambio cultural, social y político. Aun así,

pocos intelectuales de hoy saben más de religión que el hecho

de que llevó a las Cruzadas y a la quema de brujas y por eso

debe ser arrojada al aire.

 

Mientras tanto, los intelectuales que estudian la fe seriamente

y la señalan como una fuente importante de verdad, son

tratados como poco científicos o como que superficialmente

enuncian improcedencias. En la cultura moderna, hay un

rechazo feroz a la idea de que las sociedades son religiosas

desde sus raíces. Y, en el mundo académico, es como si la

ignorancia deliberada de una fuerza primaria en toda la historia

humana fuera usada como una insignia de honor. ¿Por qué?

Creo que representa una clase de rebelión contra la moralidad,

así como también una institucionalización masiva de primer

pecado en el jardín: el deseo de fabricar estándares éticos que

conformen a los deseos y prácticas personales. 

Independientemente de la fuente, dentro de los muchos efectos

desafortunados está que los intelectuales modernos evitan

aprender de teólogos e historiadores religiosos. Mientras tanto,

teólogos y profesores de seminario se sienten distanciados de

la comunidad académica, de manera que, también ellos, tienen

menos probabilidades de tomar de la sabiduría de los

economistas e historiadores del academicismo. 

Recuerdo que al hablar con un grupo de economistas, un

premio Nobel objetó mi visión religiosa. Tuve que recordarle

que su profesión estaba fundada por sacerdotes con entrenamiento teológico. Similarmente, entre algunos conservadores, existe la pretensión de que la autoridad religiosa automáticamente se traduce en sabiduría económica y política. Lo cierto es que necesitamos entender ambas: la base religiosa de la ciencia económica y la ciencia en sí misma como un campo de investigación independiente y legítimo, del cual todos los religiosos pueden aprender.

 

Professor Felice: ¿Cree Ud. que la vida intelectual siempre ha estado tentada por la arrogancia?

 

Padre Sirico: La pretensión del conocimiento es un problema antiguo, y ciertamente una gran dificultad para los estudiosos, pero esta actitud se ha desatado hoy porque la teología, como disciplina, está pasando tiempos difíciles. Enfrentamos una situación muy diferente de la que prevaleció en la Edad Media, cuando la universidad era un lugar de gran intercambio interdisciplinario y donde la teología era considerada el paraguas intelectual de cualquier otra ciencia.

 

Debido a que esto ya no es verdad, todos los controles de la perpetuación de la necedad intelectual se han quitado. Hoy observamos mucho absurdo evidente disfrazado de ciencia. Por ejemplo, el creciente movimiento que sostiene que es una forma de terapia permitida que los psicólogos se involucren en relaciones sexuales con sus pacientes, o el movimiento para legitimar moralmente la pedofilia. Al mismo tiempo, estamos buscando una seudo religión, ingresando por la puerta trasera en movimientos como el ambientalismo radical, y el nuevo gusto por la brujería en ciudades universitarias, entre otras tendencias bizarras.

 

Professor Felice: ¿Qué pasa con esta tendencia, es nueva o es simplemente una recapitulación de viejos errores?

 

Padre Sirico: Herejía, para usar un término fuera de moda que en realidad tiene un significado preciso en la historia de las ideas, es reconocible en todas las épocas. Pero, lo que yo creo nos diferencia, es esta tendencia a rechazar hasta la posibilidad de un objetivo, comprensible, ni hablar de la ética universal. No veíamos esto en la antigua Roma. No veíamos esto en la historia del cristianismo exceptuando un puñado de cultos maniáticos del siglo XV que creían que la ley no era necesaria, o que el capricho y la moralidad eran indiferenciables. Estos cultos se extinguieron rápidamente.

 

¿Hoy?. La gente es alentada a identificar su propio comportamiento con moralidad, eliminando completamente la idea de que debería haber un objetivo estándar al que todos deberíamos aspirar. Todos estamos alentados a inventar nuestra propia moralidad, y el resultado en la práctica es que no hay moralidad que sea reforzada privadamente, y entonces, el Estado llena el vacío con edictos políticos.

 

En la memoria viviente de la gente, había una frase en circulación: la gente decía, "soy un mal católico". Su

hipocresía evidente fue el homenaje que sus vicios rindieron

a la existencia de la virtud. Pero hoy no tenemos "malos

católicos"; tenemos "católicos disidentes". Esta gente no

resistió y decidieron que su difícil condición, no es un

problema a resolver, sino una protesta contra la autoridad.

 

Professor Felice: Es ciertamente un hecho que la ética

Socialista, que eleva la igualdad bajo una sola autoridad como

un ideal, sobrevive y prolifera.

 

Padre Sirico: El Socialismo es un buen ejemplo de un mito

que hace mucho debería haber sido acabado, basado en la

evidencia. Aun así sobrevive, porque la ideología Socialista

se beneficia de todos los errores que más tientan a los

intelectuales de nuestros tiempos. Alienta a hombres brillantes

a imaginarse como dictadores y planificadores sociales remodelando la naturaleza humana de acuerdo con sus sueños.

Propone la posibilidad de obtener un conocimiento secreto,

en forma de plan central, poseído por unos pocos con poder

para hacer sus sueños realidad. Prescinde de nociones como

la dignidad y los derechos humanos.

 

Es interesante considerar también dos grandes formas de

socialismo que sobreviven aún hoy. La primera trata al mundo

como la única realidad y todo fuera del mundo material es un

mito. Es una forma convencional de socialismo seudo­

científico que uno encuentra en los departamentos de ciencia

política. La otra forma considera al mundo material

completamente malvado y alienta a la adopción de la pobreza

y al esteticismo para el beneficio del medio ambiente. Se

arraiga en una profunda animosidad contra la tecnología, la

industrialización y el comercio.

 

En esta extraña vacilación ideológica entre el materialismo

extremo y el extremo anti-materialismo, perdemos el

entendimiento cristiano, tal como está descrito en la obra

estándar y cristiana de San Agustín, "La Ciudad de Dios".

En lugar de ver al mundo como obra de Dios, se nos dice que,

alternativamente, adoremos y despreciemos al mundo.

 

La razón tiene que ver con este moderno Gnosticismo que

llamamos "socialismo". Se supone que los estudiantes se

sienten a los pies de sus cultos profesores para descubrir la

enseñanza secreta, que es en realidad falsedad y mentiras. No

es sorprendente que los estudiantes abandonen las

universidades sin nada de la sabiduría que originalmente

inspiró a los fundadores de las universidades.

 

Professor Felice: ¿De qué manera el Acton Institute responde a este problema?

 

Padre Sirico: Parte de nuestra misión es restablecer algo del

legendario sentido de lo académico en los tiempos modernos.

Intentamos derribar los muros que prohiben el intercambio

entre el mundo religioso secular y el ortodoxo. No podemos recrear la Universidad de Salamanca del siglo XVI por el paso

del tiempo. En cambio, usamos cada medio tecnológico y financiero disponible para proveer una infraestructura de

apoyo intelectual para los individuos dentro de lo académico

que comprendan y practiquen la fe.

 

Muy a menudo, esta gente se encuentra conflictuada, por lo

tanto, si intentan aplicar su fe a su propia profesión, de forma

seria, deben buscar canales independientes para la enseñanza

y el aprendizaje. Nosotros facilitamos "foros" y canales de

publicación, junto con una oportunidad de que los estudiantes         aprendan de un cuerpo docente que no erige muros artificiales

entre, por ejemplo, la economía y la religión.

 

Aceptamos el Viejo modelo Escolástico de que toda verdad está, a fin de cuentas, interrelacionada y conectada con La

Verdad, e intentamos aplicar esta idea a nuestros programas, con especialización en economía y políticas sociales. De

muchas maneras, la separación entre lo sagrado y lo secular

en el aprendizaje ha llegado demasiado lejos en nuestros

tiempos.

 

Los Escolásticos creían que cuando estaban haciendo algún

trabajo científico, por ejemplo, en la astronomía, estaban

descubriendo más sobre Dios, de la misma manera que los teólogos. También pensaban lo mismo en relación a la

economía. Cuando San Bernardino escribió sus ensayos sobre

el valor del dinero, mientras evangelizaba por la fe, creyó que

estaba descubriendo algo sobre la ley natural de la que Dios

es el autor.

 

Si una persona está haciendo un buen trabajo en teoría social,

política o económica, esa persona está descubriendo nuevos

aspectos de la manera en que funciona el mundo que Dios creó. Está redescubriendo nuevas aplicaciones de la ley natu­ral tal como fue. Cuando agregamos la dimensión ética,

generamos una investigación teórica aún más rica. Muy a

menudo, los pensadores religiosos trabajan aislados de los

científicos sociales, mientras que los científicos sociales están

alejados del evolucionado pensamiento ético y religioso. La

forma de lograr una reconciliación superior es unir ambos

lados en una atmósfera de investigación intelectual libre.   

 

Professor Felice: Aun así, pocas personas que hayan seguido

el trabajo del Acton Institute lo reconocen como puramente

restaurado.

 

Padre Sirico: El espíritu es recobrar una visión de la sociedad

más armoniosa, de todas maneras su aplicación es particular          a los tiempos que corren. Estamos intentando amalgamar lo

mejor de los desarrollos modernos en teología, enseñanza social y en las ciencias sociales. No debemos temer de saltar

dentro de los círculos intelectuales donde nuestras ideas no

son siempre bienvenidas. No debemos temer de entrar en círculos teológicos donde el pensamiento económico moderno es desconocido porque ha sido negado. Hasta hoy soy la per­

sona mayor dentro del Instituto, de manera que es imposible

pensarlo como el hogar de ancianos chapados a la antigua

perturbados por el estado del mundo.

La Encarnación es el modelo de nuestra espiritualidad y debe

también ser el modelo de nuestra estrategia intelectual. Esto

es lo que nuestro Señor hizo. El Evangelio de Juan dice que

Vino a lo Suyo. También nosotros hemos sido ubicados en

estos tiempos por fines específicos y traicionamos esos

propósitos si no necesitamos más que languidecer por

"aquellos días pasados”. Vivimos épocas de progreso

económico y resurgimiento espiritual, y necesitamos acordar

una relación entre ambos. Si, puede ser frustrante. Los círculos

religiosos no están siempre contentos de tener que tratar con

las complicaciones de la ciencia y el pensamiento económico

avanzado, y ciertamente, Wall Street rara vez tiene ánimo de

escuchar que hay obligaciones morales que van más allá de las ganancias.

 

A pesar de eso, no vamos a replegarnos a nutrir sólo a un pequeño grupo de personas convencidas de que tenemos razón

y de que el resto está equivocado. Siempre he creído que una

de nuestras prioridades es llevar el mensaje a un público más

amplio de la manera que podamos. Si eso significa escribir

para el New York Times, o aparecer en la National Public

Radio (Radio Nacional Pública), debemos hacerlo. Es bueno

para nosotros, también, porque esa exposición nos ayuda a

manejarnos con responsabilidad y justificación, y a estar

constantemente conscientes de las barreras que enfrentamos.

Nosotros, también, debemos "venir a lo nuestro”, aún si, o

especialmente, si no somos tan bien recibidos. Estas son

épocas muy excitantes para vivir.

 

Professor Felice: ¿Qué tendencias considera como las más

alentadoras?

 

Padre Sirico: Desde el punto de vista político, el colapso del

comunismo fue increíblemente maravilloso ver. En los

mismos meses que se fundó el Acton Institute, estábamos

presenciando la caída del muro de Berlín. Mucha gente ya no

recuerda la Guerra Fría, pero esos eran días en que ellos vivían

con miedo de un aniquilamiento nuclear, tiempos en que

dependíamos de la sabiduría y prudencia de nuestros

gobemantes para protegernos de la calamidad. Estos miedos

se han disipado sustancialmente y desde el final de la Guerra

Fría, y cuando pensamos en las nuevas libertades de la gente

en Rusia, el Este Europeo y América Latina, no podemos más

que entusiasmarnos y alentarnos.

 

No debemos olvidar que la fuerza precipitadora que originó

esto fue más religiosa que política. El sistema económico del

socialismo no funcionaba por década y tal dificultad fue cada

vez más difícil de ignorar. El sistema socialista fue

oficialmente ateo y declaraba guerra no sólo a la ley económica

sino también a las intuiciones religiosas de los individuos.

Tal sistema no podía perdurar.

 

El Papa tuvo un profundo sentido que su misión personal era ponerse firme ante los déspotas y demandar que reconocieran

los derechos humanos. Nunca titubeó en su convicción de que el comunismo estaba equivocado y no podía durar. Su fuerza inspiró a disidentes políticos alrededor del mundo, una fuerza a la que debemos darle el crédito del poder de la oración; en verdad, el colapso de la Unión Soviética fue una respuesta a las oraciones de muchos millones alrededor del mundo.

 

Luego del colapso, hemos disfrutado de una nueva oportunidad

de evangelización fabulosa, así como de nuevas oportunidades

de cooperación ecuménica en asuntos políticos y hasta

teológicos. El movimiento ecuménico ya no está dominado

por un grupo de teólogos ortodoxos dirigiéndose a otro grupo

de teólogos ortodoxos. Hoy en día, creyentes ortodoxos

provenientes de una amplia gama de tradiciones trabajan juntos en una cantidad de asuntos desde aborto y derechos humanos hasta temas éticos que involucran la sexualidad.

En el reino de la economía, no hay competidor serio a la

economía de mercado, la cual, se sabe ampliamente, es el

mecanismo más productivo que el mundo haya conocido para

incrementar el estándar de vida de toda clase de gente y

permitir que todos participen del proceso económico en algún

nivel. Lo que yo creo que todavía no hemos entendido es que

los mercados constituyen algo más que un mero sistema de

organización de la producción y la distribución; son unamanifestación de la interacción humana voluntaria, una medida de la solidaridad humana, una fuente para custodiar el derechoa la iniciativa económica.

 

Y esto ha sucedido en la historia reciente y nos provee de

razones más que suficientes para estar esperanzados con el

futuro. La esperanza, nunca debemos olvidarlo, es una virtud

cristiana que debe ser cultivada para que podamos desarrollar

una perspectiva adecuada en todas nuestras actividades,

vocacionales y espirituales.

 

Professor Felice: La principal crítica a las sociedades post­

comunistas es haber caído en diferentes formas de error, desde

el comunismo enervado al capitalismo decadente.       

 

Padre Sirico: Al hacer tales observaciones sobre un

capitalismo realmente existente, debemos formular nuestras

críticas apropiadamente, para que no estén apuntando a todo

el sistema económico libre como tal, sino más bien, a los

valores de aquellos que despilfarran esa libertad. La ética

capitalista debe estar atemperada con la tradición, la moralidad,

el respeto por las formas establecidas del pasado, y una

participación cívica activa. La verdad económica sobre el

hombre es verdadera, pero no es toda la verdad. Los mercados

no contienen dentro de sí una lógica moral; ésta, debe ser provista por la fe.

 

No deberíamos desacreditar nunca el deseo de la gente de vivir más cómodamente de lo que lo hacen. La mejora en los estándares de vida es coherente con la promoción de los derechos humanos y la dignidad humana. Tengo una discusión continua con los pensadores religiosos que encuentran algo indecoroso en la vocación empresarial o en la mera existencia de riquezas originadas por la perspicacia capitalista. Al mismo tiempo, las Sagradas Escrituras y los escritores espirituales advierten, una y otra vez, que la riqueza y los estándares de vida no son un, medio de salvación.

 

Irónicamente, los que ven la riqueza y la condenan abiertamente, a menudo lo hacen porque ellos mismos la ven como un fin, y perciben que ese fin está vacío. Reconocen la superficialidad, pero esa no es la única manera de ver a la riqueza. Al ver la riqueza como un medio, podemos notar que es la única manera de incrementar el conocimiento y el bienestar humano a través de la claridad, la inversión y la filantropía. La tragedia comienza cuando una persona que ha producido mucho, cree que solo la riqueza constituye un estado final. No puede ser así y no es. La riqueza puede cegar o ser un medio para grandes obras. Depende de lo que hagamos con ella.

 

Professor Felice: ¿Qué peligro en particular, si hay alguno está sociado con las nuevas tecnologías?

Padre Sirico: Si nos acercamos a la nueva tecnología como analfabetos morales, ciertamente tendremos un problema. Pero el problema no es la tecnología. El problema es de naturaleza moral. La tecnología no nos dice cuáles son las prioridades o qué hacer. Sólo nos da la oportunidad de hacer lo que queramos más eficientemente. Entonces, cuando se nos presentan nuevas alternativas y nuevos medios sin el contexto moral, el resultado es una especie de caos moral.

 

Por ejemplo, la Internet ha provisto medios más fáciles de lograr acceso a contenidos moralmente impuros, pero siempre han estado disponibles en la sociedad y nunca nos liberamos de la necesidad de tener que elegir entre el bien y el mal. El advenimiento de la Intemet no cambia la naturaleza de esa elección para nada. Es por esto que la libertad, que hace posible el avance tecnológico, debe subsistir en un marco moral amplio.

 

La tecnología ha ayudado a la propagación del odio y la maldad, pero también a ayudado a la propagación del Evangelio. Hoy, no hay nuevos problemas morales. Son los mismos problemas morales, que aparecen en situaciones nuevas. El problema con la Intemet no es que disemine contenido rápidamente; es un problema de lujuria. Aquellos que creen que de alguna manera pueden restringir el contenido otorgándole al gobierno el poder de la censura, verán que esa posición tendrá un efecto contraproducente. Los padres y empleadores están en una mejor posición para definir esos límites.

En cuanto a los que predicen tanto la condena social como la

salvación como consecuencia de la tecnología, consideren que

algunas personas pensaron que el teléfono llevaría al fin del

lenguaje escrito. Otros creyeron que llevaría al fin de la

soledad. De hecho, las tecnologías rara vez generaron cambios

revolucionarios y nunca alteraron la naturaleza humana:

simplemente, llevaron a cambios prácticos en la forma en lo

cotidiano.

 

Professor Felice: Sus comentarios relativos a la ética en el

capitalismo parecen siempre retomar el tema de las elecciones

de la persona actuante.

 

Padre Sirico: Los periódicos y libros de textos están llenos

de entredichos sobre la -ética social-, pero una vez analizada

la terminología, uno se encuentra con que son códigos para

formas de intervención gubernamental. No siempre pero a

menudo. Encuentro mucho más útil mirar hacia la ética

comercial y la ética social, sean lo que sean, como extensiones

de la ética personal.

La persona es simultáneamente individual y social, actuando

por sí misma, pero nunca sin consecuencia por las vidas de

los otros. Toda nuestra vida involucra el trabajo de estas dos

dimensiones de nuestra naturaleza. En cualquier estructura

económica o política debe ser tomar en cuenta esta realidad.

Es por esto que ambos, el individualismo radical y el

colectivismo radical son contrarios a nuestra naturaleza.

Si queremos una buena ética comercial, necesitamos cultivar

una buena ética personal. Si queremos justicia social y ética

social, necesitamos cultivar la moral desde los niveles más

bajos posibles de la sociedad. Entonces, sí, siempre se retorna

al ser humano.

Professor Felice: Aún no hemos hablado del ambientalismo

            que ha hecho grandes ataques a la Iglesia.

 

            Padre Sirico: Hay un cierto número de fundaciones muy

            bien financiadas que están buscando crear una eco-teología o

            una eco-espiritualidad. Algunas partes de estos movimientos

            no son enteramente objetables. Aún dentro de la cristiandad,

            San Francisco es visto como una persona que expresó su amor

            por Su creación. Pero algunas veces se olvida que San Francisco no es solamente el santo patrono de la ecología, sino

            también de los comerciantes. El comerciante tiene la

            responsabilidad de cuidar los recursos de la tierra y utilizarlos

            productivamente.

 

            En la eco-teología, hay una teoría de la vida y la espiritualidad

            que no está enfocada en el ser humano, sino más bien, en todas las otras cosas, y que generalmente supone que exista un conflicto intransigente entre el hombre y la naturaleza; aún más, que el hombre debería ser designado como el perdedor de este conflicto. Algunas radicales creen que el medioambiente estaría mejor si se extinguiera el hombre, y tienen una capacidad notoria para ignorar la crueldad inherente al de un medioambiente inexplorado.

 

Esto es nada más que un nuevo Maniqueísmo, que es una variante del Gnosticismo. Las disciplinas del Mani creen que es malvado alterar la naturaleza. Sus sacerdotes superiores se sientan bajo los árboles y esperan a que los melones caigan. Es así pues, que es una teoría loca y radical que está tratando de ganar importancia mediante una unión con la cristiandad. El Acton Institute ha intentado contrarrestar la propaganda de los ambientalistas de izquierda y su intento de bautizar, lo que aparece, en mi opinión, como una idea pagana. Y, hemos tenido cierto grado de éxito.

 

Recuerdo estar en Nicaragua después de la caída del comunismo. Violeta Chamorro se entrenaba como presidente y habían algunas personas en una demostración en la calle. Me acerqué a hablar con ellos. Sabían que yo era un sacerdote pero no que estaba ahí como amigo de Chamorro. Les pregunté que iban a hacer ahora que el comunismo estaba fuera del poder. Un hombre me dijo: "nos vamos a los Estados Unidos para participar en el movimiento ambientalista".

 

En ese preciso momento, vi el escenario completo. Este movimiento es otro acto de una obra mayor. Los accesorios y los actores son diferentes, pero la obra es la misma. La idea de Marx es que en la sociedad abundan los conflictos y la hostilidad. principalmente entre trabajadores y capitalistas. Dicha idea ya no es viable, entonces el modelo marxista ha sido cambiado para adoptar un conflicto intransigente entre el hombre y la naturaleza. De la misma manera, el feminismo adopta un conflicto intransigente entre el hombre y la mujer. Esto representa un total repudio de la visión Judeocristiana del mundo.

 

Professor Felice: ¿Cúal es la visión bíblica del medioambiente?

Padre Sirico: Podemos ir a la Biblia y ver que la persona fue hecha para tener dominio de la naturaleza y ejercitar su mayordomía a través de la propiedad. También podemos ir a San Agustín y ver las primeras comprensiones cristianas de trabajo: él directamente rechaza la idea de que las plantas y los animales tengan los mismos derechos que la gente.

 

Ridiculizó la idea de que la matanza de animales sea lo mismo que un asesinato. Los animales no tienen derechos, pero no debemos abusar de ellos porque nos envilece. No debemos tratar a los animales de la manera en que ellos se tratan.

 

Hay una interdependencia natural entre el capitalista y el trabajador, entre hombres y mujeres, y entre el hombre y la naturaleza. Nos interesa tener un medioambiente limpio, pero la forma de lograrlo es liberando la creatividad y la inteligencia humana. Cuando obstruimos y regulamos ese conocimiento, distorsionamos valores y hacemos que la gente abuse de cosas que son relativamente escasas y hacemos que sobre produzcan cosas que no están siendo valuadas. Esta es la fuente de muchos de los problemas ambientales de hoy. Los valores religiosos aparecen en escena aquí, porque la tierra es del Señor y también la abundancia. Debemos admirar la belleza de la naturaleza y saber que debe ser usada sabiamente de acuerdo a la razón y la inteligencia. Este logro proviene de la propiedad privada de los recursos. Aún así, el movimiento político conocido como ambientalismo trata de restringir la libertad del hombre de poseer, controlar y limpiar el medioambiente.

 

Todos los días, cuando digo la Misa, durante la Consagración, hablo del pan y del vino como "el trabajo de las manos humanas". Es altamente significativo que Nuestro Señor no haya usado una espiga de trigo y uvas en la última cena, artículos tomados en bruto de la naturaleza. Usó artículos que habían sido transformados para consumo del hombre en un proceso de producción, y que, por su lado, son transformados mediante Su poder en la Sangre y Cuerpo de Cristo.

 

Professor Felice: El ambientalismo espiritual puede ser una herejía de moda del momento, pero en los ochenta, fue la Teología de la Liberación.

 

Padre Sirico: Pretendía ser una nueva forma de hacer teología. Fue enseñada en casi todos los seminarios. Los libros de sus teóricos líderes se vendieron en cientos de miles. Los movimientos guerrilleros de América Latina se organizaron en torno a este modelo, que es otro ejemplo de Marxismo bautizado. Y luego, de repente, todo colapsó. Fue refutado intelectualmente y ahora se lo discute como un breve período en la historia de las ideas religiosas. Algún día, veremos de la misma manera al ambientalismo.

 

Professor Felice: Otro movimiento que nada tiene que ver con el trabajo infantil en el tercer Mundo.

 

Padre Sirico: Este asunto está conectado con un tema del desarrollo de la economía en general, un tema que requiere mucho estudio y reflexión. Desafortunadamente, muchos líderes religiosos lo ven como un problema de derechos humanos y algo que puede ser resuelto a través de la legislación internacional y la generosidad. Ciertamente, la mayoría de la gente cree que algunos serán ayudados con la generosidad de otros.

La verdad es que cuando miramos al período de la historia

con los mayores avances en bienestar material y médico,

encontramos que fue el motor productivo de la economía de

mercado el que hizo la diferencia. Si observamos el acceso a

seguros médicos, comida, vestimenta, transporte, los últimos

ciento cincuenta años representan un aumento sobresaliente

fuera de la pobreza. Si queremos extender esto a aquellas

áreas que aún no han sido impactadas, debemos admitir que

ni siquiera las mejores organizaciones de caridad pueden hacer

lo que el comercio puede. Esto es claramente innegable.

Esos países menos desarrollados donde los jóvenes trabajan

en fábricas, están dominados por sistemas mercantilistas de

gobierno. La propia existencia de compañías multinacionales

dentro de sus fronteras en una clara evidencia de que el país

está en proceso de salir lentamente de la pobreza y hacia el

desarrollo. Al comienzo del proceso, hay oportunidades para

trabajar para todas las personas, oportunidades que no existían

previamente.

La prosperidad es lo que hace posible que los jóvenes elijan

no trabajar y, en cambio, permanecer en la escuela. Los países

capitalistas avanzados han comprobado que la mano de obra

experimentada es también más valiosa para la producción que

la no experimentada, razón por la cual mucha gente descubre

que tienen mejores cosas que hacer que trabajar tiempo

completo. Sin embargo la mayoría de estos países pobres,

no pueden darse ese lujo, de manera que la alternativa a la

mano de obra joven y barata no es la educación sino la pobreza

y la hambruna. La gente del Tercer Mundo elige hacer cosas

y trabajar bajo condiciones que nosotros encontraríamos

intolerables. Esto refleja el estado actual de desarrollo de

esos países.

Si hacemos imposible que las empresas hagan negocios allí,

destruyendo la base trabajadora de esos países, destruimos

sus perspectivas económicas también. Lo que deberíamos

hacer no es abolir el trabajo infantil por ley sino de facto, a

través de un proceso económico. También, tenemos que

examinar las motivaciones detrás de los grupos que ejercen

presión en la legislación internacional. La mayoría son uniones

sindicales que tienen un interés financiero, no en los derechos

humanos, sino en la eliminación de los productos competidores

del extranjero.

 

Professor Felice: ¿Son los Estados Unidos culpables de

alguna manera de la dificil situación de los pobres en los países

menos desarrollados?

 

Padre Sirico: Ciertamente. Tenemos un sistema de tarifas y

regulaciones que está diseñado para excluir los productos del

Tercer Mundo y castigar a las empresas Americanas que abren

sus fábricas allá. Esto no solamente daña al consumidor

americano y a las empresas; también, erige barreras legales

contra el desarrollo en esos países. Esto es manifiestamente

inmoral. Si no hiciéramos más que reducir las barreras

comerciales, no veríamos más que prosperidad. Ahora mismo, retórica de los Estados Unidos del libre comercio, no es

coherente con la realidad proteccionista.

 

Permítame agregar un punto con respecto a las sanciones,

porque está relacionado. Actualmente, los Estados Unidos

imponen sanciones, pequeñas y grandes. Las sanciones han

sido particularmente brutales en Yugoslavia, Cuba, Libia e

Irak, donde han resultado en la muerte de millones de niños

por debajo de los cinco años, de acuerdo a las Naciones Unidas.

Las sanciones no funcionan para cumplir un objetivo político.

Resultan dándole al déspota de turno. un demonio internacional al cual culpar. Una herramienta esencial para mantener el poder. Las sanciones de los Estados Unidos con tra Cuba y China, por ejemplo. le ha dado a Fidel Castro su mayor propaganda de victoria. Además. son itimorales puesto que castigan a la gente, no a los gobiernos. He viajado mucho            por Cuba y China países con regímenes opresivos os ni una sola vez, alguna víctima de los gobiernos de esos paises me ha dicho: “me ayudaría que los Estados Unidos impusieran o ajustaran el embargo económico."

 

Yo no suspendería las sanciones en tiempos de guerra, pero

deberían ser temporales y diseñadas para lograr un fin específico. No deben generar hostilidades innecesarias.

Debemos recordar que el comercio es la base de nuestros contactos culturales con estos países y la única posibilidad

que la gente tiene de mejorar su suerte en la vida.

 

El comercio conlleva la esperanza de otorgar poder a las instituciones           cívicas capaces de generar movimientos políticos contra el   gobierno. En lo que a mi respecta, si las sanciones de los          Estados Unidos han lastimado al menos un niño inocente,

es razón suficiente para repelerías. Es un antiguo principio de

la ética cristiana que los no combatientes nunca se tomen

víctimas de las guerras entre los gobiernos.

 

Professor Felice: ¿Y que opina de las agencias internacionales?

 

Padre Sirico: En todo el debate sobre la globalización, la gente ha fracasado en distinguir entre las dos clases: la clase creativa y buena que viene con el comercio y crece de un proceso de mercado, y la destructiva que está impuesta por

el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, y otras agencias. Es asombroso pensar en el daño que dichas organizaciones causaron en el nombre del bien. Mientras estuve en China, visité iglesias subterráneas que se inundaban por una represa que estaba siendo financiada por el Banco Mundial y que ciertamente no hubiera sido emprendida si empresarios privados hubieran tomado las decisiones.

 

Las agencias internacionales están casadas con un estilo Keynesiano de administración económica. Su paquete de recomendaciones para el Tercer Mundo requiere

típicamente el pago de la deuda externa a través de aumentos

impositivos.

 

Ahora, sólo requiere de un poquito de buen sentido que lo último que los países pobres necesitan son impuestos más altos, pero eso es lo que gana si siguen al FMI. AIFMI también le gusta hacer sus préstamos dependientes de seguir el plan al pie de la letra. Pero, muy frecuentemente, el plan sirve si el objetivo es fortalecer a la junta gobernante Si uno desea prosperidad, debe tomar otro camino. Al respecto, recomiendo altamente el trabajo de Hernando de Soto.

 

Concedo que el Vaticano ha sido bastante inocente en el manejo de la crisis de la deuda del Tercer Mundo. La idea generalmente ha sido que ésta debería ser olvidada y repudiada. Pero al menos el Vaticano entiende lo que el FMI no: que honrar la deuda con las espaldas de la gente no es el camino a seguir. En relación con este problema, el único camino a seguir es el que afrontaría indirectamente mediante una mejora en el conjunto de la estructura económica a través del comercio y la inversión. Este es un tema que no ha sido tratado lo suficiente ni por las agencias internacionales, ni por el Vaticano.

 

Professor Felice: Tal vez el sector económico tenga la obligación moral de señalar esto.

 

Padre Sirico: La tiene, efectivamente, pero primero, el sector económico necesita estar educado acerca de los problemas. Tendemos a pensar que los gerentes son sofisticados en su entendimiento de la libre empresa. No es así. Es muy probable que ellos carezcan de la perspectiva moral sobre los méritos de su vocación. Constantemente se les dice, tanto en los medios como los ministros el púlpito, que su vocación es moralmente sospechosa. por eso, es aún menos probable que sientan algún nivel de culpabilidad por lo que hacen.

 

Cuando el Papa estuvo en América Latina unos años atrás, dio una homilía muy interesante en la que decía que la Iglesia cristiana tiene la obligación de llevar el evangelio no sólo a los pobres, sino también a los ricos y poderosos. Fue muy interesante porque revirtió la lógica de la teología libertaria que pregona por los pobres pero demoniza a los ricos. Sin embargo, demonizando la riqueza, cortamos los canales de evangelización.

 

Aún más, es moralmente y científicamente inexacto decir que su efecto en la sociedad es negativo. Cada vez que tengo la oportunidad de predicar con empresarios, comienzo explicando por qué su profesión es legítima y elogiable, y les recuerdo que son el principal motor para generar la prosperidad que hace posible a la civilización.

 

Las personas no abandonan sus ideas cuando se inician en los

negocios, las vivencias y, con la educación económica

apropiada, pueden ver que la vocación empresarial hace cosas

maravillosas por la gente y la sociedad al proporcionar

liberación de la pobreza.

 

Una vez comprendido eso, están preparados para escuchar a

los ministros sobre su obligación moral. Pero si comenzamos

diciéndoles que su única responsabilidad es hacer penitencia

por estar en el comercio, en primer lugar, perdemos la

oportunidad de verdadera evangelización y los alejamos desu  ocación legítima.

 

Professor Felice: ¿Y cuáles son esas responsabilidades?     

 

Padre Sirico: Deben conservar sus contratos y pagarle a sus trabajadores con atención a las clásicas, a lo que la justicia demanda: darle a cada uno lo que merece. Deben asegurarse de no lucrar con inversiones inmorales o traficar con productos que son moralmente degradantes. No deben mentir sobre sus

productos o mentirle a sus proveedores y clientes. Deben estar alerta por oportunidades, pero no deben poner en peligro la estabilidad de sus empleados mediante decisiones precipitadas o emprendiendo inversiones excesivamente riesgosas. Deben desarrollar una visión holística de su vocación de manera de no mirar solamente a las ganancias sino también al significado ético. Y, tienen la obligación de constituir una fuerza de bienestar político en la sociedad, no de financiar influencias políticamente destructivas sino de apoyar a aquellos que están atentos al marco jurídico cristiano. Deben ser una buena influencia judicial, especialmente en estos tiempos cuando la gente joven está mirando a los líderes económicos como modelos.

 

En sus vidas privadas, no deben descuidar a sus familias

mientras hacen su fortuna. Deben entrenar a sus hijos con los

valores apropiados y no malcriarlos. Deben apoyar a sus casas

de culto y su obligación en este aspecto crece a medida que lo

hace su cartera ejecutiva. Todas estas obligaciones son muy

serias y tienen gran peso para aquellos que han elegido la

vocación empresarial.

 

Professor Felice: Ud. escribió que la Parábola de los Talentos,

desde el capítulo veinticinco del Evangelio de San Mateo,

ofrece algunas lecciones al respecto.

 

Padre Sirico: Sí, y explicando las implicancias económicas

y prácticas de esa parábola, no pretendo despreciar su

significado teológico, el cual tiene que ver con cómo usamos

el don de la fe. No debemos malgastar la oportunidad de

salvación, ésa es la principal lección. No obstante, la verdad

implicada en las parábolas de Jesús es multidimensional,

entonces si rechazamos su importancia práctica, estamos

perdiendo algo importante.

 

En la parábola, cada siervo recibe cierta cantidad de talentos

para cuidar, una palabra que tiene un doble significado, el

propio de la definición y el de suma monetaria. Los siervos

que son elogiados cuando el amo regresa habían duplicado el

valor de su suma a través de inversiones. Cinco talentos se volvieron diez, y dos se volvieron cuatro. El siervo que es desterrado, había enterrado sus talentos. Escuche lo que el amo dice: "sabías que yo cosecho donde no sembré y recojo donde no esparcía; debías, pues, haber entregado mi dinero a los banqueros, y así, al volver yo, habría cobrado lo mío con los intereses."

 

Fascinante, ¿ no ? Aquí tenemos una descripción del proceso de descubrimiento de generación de riqueza de la empresa: cosechar donde uno ha sembrado. Y, tenemos un respaldo moral a la paga de intereses, Ahora, si uno conoce teoría económica, sabe que la tasa de interés tiende a igualar el retorno de capital en el tiempo. Es decir, si uno está ganando intereses a la misma tasa que el capital lo gana, uno está manejando el propio dinero en un estándar mínimo. Si uno no ha ganado interés, el amo deja entrever, uno ha perdido dinero, en realidad, porque, como mínimo, el dinero podría haber estado activo haciendo algún beneficio en manos de alguien.       

 

Esta parábola muestra una comprensión sofisticada de los procesos económicos de la economía de empresa. Obviamente, no es una parábola a la que los Socialistas Cristianos le presten atención. A propósito, otras parábolas como las de los trabajadores en los viñedos, del capítulo veinte de Mateo, ofrecen otras lecciones económicas que preservan contra la envidia y acentúan los derechos de los empleadores a ser generosos con su propiedad, aún si lleva a una distribución desigual.

 

Professor Felice: ¿Qué clase de trabajo ha hecho el Acton Institute en el campo de la educación?

 

Padre Sirico: En los Estados Unidos, los padres que eligen enviar a sus hijos a escuelas privadas, para lo cual tienen derecho, están obligados a pagar el doble: a través de impuestos para mantener escuelas que ellos no usan y para escuelas que sí usan. Está reconocido generalmente que la calidad de las escuelas públicas es inferior a la de las privadas, aunque no siempre sea así. La razón es la misma por la cual

las economías libres funcionan mejor que las socialistas: la

propiedad privada y la responsabilidad del dueño hace que la

gente responda mejor por cuán bien realiza su trabajo. La

producción se realiza más eficientemente. El objetivo de la

reforma educativa debería ser la introducción de fuerzas

competitivas que mejoren la calidad en el largo plazo.

 

Hay muchas maneras de hacer esto, algunas mejores que otras.

Los cupones son de ayuda pero también generan peligros de

control gubernamental en las escuelas privadas. Una

desgravación fiscal para aquellos que usan escuelas privadas

sería un buen cambio. Una desgravación fiscal generalizada,

que abriría los beneficios de la alternativa privada a una franja

más amplia de la población, sería aún mejor. El punto moral aquí es recordar que son los padres quienes deben cargar

con la principal responsabilidad de la educación. Esto es

en contra de lo cual gran parte de la industria de la educación

pública está organizada.

 

Me siento muy reconfortado por el crecimiento de la educación

hogareña en los Estados Unidos. Representa una tendencia

en la que los padres están tomando responsabilidad directa

por la educación de sus hijos. Los resultados prácticos han sido impresionantes. No es para todo el mundo, pero para aquellos que quieren y pueden hacerlo, es una forma excelente de proceder. El punto principal de toda reforma debe ser recordar el principio de que el gobierno no es, ni puede ser educador en primer recurso. No tengo duda de que si hiciéramos del gobierno el productor de zapatos como primer recurso, arruinaríamos la calidad de los mismos muy rápido.

 

Es totalmente natural en el mundo que los padres se involucren con la educación de sus hijos, La educación publica en los Estados Unidos ha trabajado para adaptar a los padres contra ese impulso. Necesitamos recobrarlo. Hacerlo requerirá disminuir la influencia política en los sindicatos docentes, que son bastante hostiles a la intervención de los padres. Su prin­cipal motivación no es el bienestar de los niños, sino la escala        de pago de los profesionales de la educación.

Hay problemas culturales adicionales que necesiten ser tratados. Los padres precisan desarrollar un rasgo cultural distintivo y adherirse a alguno arraigado en un estándar ético perdurable y direccionado a normas trascendentes. No podemos esperar que la cultura prevaleciente refuerce esto por nosotros. Debemos ponernos firmes en nuestras convicciones y en nuestro sentido de quiénes somos como personas, y adherir a eso, sin tomar en cuenta tendencias políticas o económicas.

 

Professor Felice: Ciertamente, surgen conflictos entre ambos: por ejemplo, el calendario litúrgico y el capitalista no están siempre en sincronía.

 

Padre Sirico: Me afecta todos los años principalmente durante el Advenimiento. La economía americana nunca te hizo lugar a esta temporada, que supuestamente es una recapitulación, en forma más pequeña de la Cuaresma. En cambio, la temporada de Navidad comienza seis semanas antes, y el Advenimiento directamente no empieza para nada. He visto decoraciones de Navidad antes de ¡El día de los Muertos! Por otro lado la cultura económica también ignora la Cuaresma y trata a las Pascuas como un feriado para celebrar conejitos y huevos de colores.

¿Qué podemos hacer con esto? Necesitamos adherirnos al calendario religioso en nuestros hogares y asociaciones privadas. Quiero ver el regreso de los verdaderos días de Navidad, que comienza el 25 de diciembre y continúa durnte doce días. No hay nada malo en dar regalos para Navidad. En la primera celebración, se obsequiaron algunos presentes muy caros. Pero. necesitamos mantener la Navidad dentro de un marco litúrgico que el mercado no provee.

 

Esto requiere que aprendamos a imponer límites a nuestro confort. Necesitamos cultivar el espíritu de desapego que el calentario litúrgico provee y que el secular no. Somos libres para trabajar siete días a la semana y acceder, en línea, a un mercado que está abierto cada minuto de cada día. Que podamos hacerlo no significa que debamos.

 

El Sabbath es necesario para asistirnos en la contemplación de Dios y su creación. Sin él, perdemos perspectiva, sucumbimos a la tentación y al mal, y nos desconectamos de Dios.

 

Pero, ¿debería el calendario litúrgico, la necesidad de límites y tiempo impuesto de contemplación, ser reforzado por los burócratas o jueces? No lo creo, puesto que el forzador también está afectado por el Pecado Original y se inclina a empujar los límites de su propio poder en detrimento de cada uno.

 

En cambio, la limitación debe provenir de la gente que responde a una autoridad superior no afectada por el Pecado Original, llamada Dios. Es un sistema de valores, un sistema religioso, de tener y hacer -con la dimensión de ser. La gran tentación de la era moderna- y, yo creo, que va más allá del tema del Sabbath, es que tendemos a pensar que somos creadores todo poderosos y amos de nuestro propio destino. Esta actitud lleva a tragedia personal y cultural.

 

Professor Felice: En un tema relacionado, algunas personas en Europa sienten que la desatención de los americanos a temas de esparcimiento y de la tan nombrada calidad de vida los está afectando también.

Padre Sirico:  Hay cierta justicia en esta queja, pero hay también una respuesta predecible al cambio económico en proceso aquí. Cuando se pide un ejemplo de cómo los americanos están damnificando a Europa, uno inevitablemente recibe una disertación sobre el flagelo de los lugares de comidas rápidas. Recuerdo un artículo reciente de un teólogo católico de Roma que se quejaba de que los lugares de comidas rápidas son una clase de herejía protestante. ¿Por qué? Porque se dice que alientan la velocidad, eficacia, e individualismo a expensas de la comunidad y la calidad.

 

Hay varias cosas por decir. Primero, la queja proviene de un italiano el país que nos proveyó la pizza, que es una comida rápida grandiosa. ¿Por qué no le tememos a las pizzerías o restaurantes chinos en Estados Unidos? Porque todas las variantes de cocina nos estimulan. Celebramos cuando un restaurante tailandés o etíope abre. Aplaudimos que abra un negocio de comida india. Éste es un punto muy interesante para que los Europeos contemplen.    

 

Segundo, nadie le dice a una persona en Mc Donald's que él o ella deba comer allí o que deba comer velozmente. El servicio es rápido, pero uno puede comer tan rápido o lento como desee. Si uno quiere entrar y ordenar una taza de café y beberla durante un rato, y luego pedir un Egg Mc Muffin no hay problema.

 

Tercero, salir a cenar solía ser un lujo que sólo los ricos podían darse. Hubo una época que sólo los aristócratas podían emplear a alguien para que les cocine, pero la economía libre llevó eso a las masas. Uno puede conducir hacia una ventana y luego retirarse con algo delicioso. Esto es maravilloso para las madres sobrecargadas, no todas las comidas, pero de vez en cuando. Ahora, adoro las comidas largas y relajadas tanto como cualquier otro, sin embargo. si tengo que hacer diez visitas pastorales en un día, aprecio no tener que perder tiempo cocinando o esperando en un restaurante.

 

Un peligro mucho mayor que aflige a todos los paises hoy en día es el tema de la televisión. Hay hogares en los que nunca se apaga. Es la guía constante y la maestra. Temo que esto es una fuente grave de corrupción en la familia y que ningún país está exento de este problema. Si tuviera que recomendar un cambio a cualquier familia que mejoraría dramáticamente sus vidas, sería que apaguen la televisión.

 

Professor Felice: Con la televisión desconectada, tendríamos

más tiempo para leer. ¿Qué recomienda?

 

Padre Sirico: Una gran pregunta, y supongo que la Sagrada Escritura aquí se da por sentada. Por el lado espiritual, les recomienda a todos los que no hayan leído Introducción a la

            Vida Devota de San Francisco La Salle, que lo haga

            inmediatamente. Si a alguien le asusta la escritura espiritual

            porque piensa que va a ser demasiado esotérica, no se

            preocupen. Este libro es sorprendentemente práctico y

            profundamente agudo.

 

            También recomiendo el gran clásico cristiano Imitación de

            Cristo de Thomas á Kempis. Los sermones del Cardenal

            Newman, que están impresos por Ignatius Press son

            maravillosos. Para el ejercicio espiritual diario, hay un clásico

            moderno En conversación con Dios de Francis Fernández.

            Sobre religión y sociedad en general, Sobre “LaCiudad de

            Dios" de San Agustín es una defensa contundente de la visión

            cristiana, es un libro fundacional de la cultura occidental. Los

            escritos del Papa Juan Pablo II, ya sean ejercicios espirituales, o encíclicas o cartas, son esenciales.

 

Sobre economía y política, la Los Fundamentos de la Libertad

de F. A. Hayek y La Acción Humana y Socialismo de Ludwig

von Mises (de 1922) son maravillosos, siempre y cuando uno

entienda que no eran tan pensadores religiosos como grandes expositores de la teoría de la libertad y sociedad. Negocios como Vocación de Michael Novak es muy útil para empresarios.    

En temas históricos, Lord Acton puede resultar dificil de leer pero bien vale el esfuerzo. La trilogía de Liberty Fund en Indianápolis debería estar en las manos de todo aquel que sea serio con respecto a la historia de la libertad. En Estados Unidos, de Tocqueville. En Europa, Christopher Dawson. Luego, está la Ética de Aristóteles, mucho más accesible de lo que su reputación sugiere, y Summa de Santo Tomás, que es continuamente sorprendente. Mejor me detengo aquí antes de comenzar a escuchar todo el canon occidental.        

 

Agrego una salvedad al terna de la lectura: Así como leer es importante, orar es aún más. Es una tarea aún más difícil, pero sin ella no puede haber ninguna esperanza. La comunicación con Dios debe estar primero que cualquier otro interés. Es una manera a través de la cual cada uno contribuye a trabajar por la propia salvación y la del mundo. Esta es una sugerencia muy práctica también, porque es algo que todos podemos comenzar a hacer en este preciso momento, en este preciso lugar.

 

Professor Felice. Gracias, Padre.